Llevamos semanas abriendo
telediarios con inestabilidades en los mercados debido a la posible guerra
entre Ucrania y Rusia y es buen momento para entender el funcionamiento de la
economía global.
No podemos negar que desde el
principio de la historia hay progreso económico y social (Recordaréis como en
una década la tecnología y la ciencia han progresado de forma exponencial). El
progreso mundial no cede, pero sí se ve afectado por inestabilidades
económicas. Es decir, la economía mundial crece y siempre lo va hacer,
no podemos negar esta evidencia.
Pero, mientras nos sumergimos en
un crecimiento continuo podemos ver ciertas crisis o inestabilidades en los
mercados, crisis que impactan en nuestra vida económica, social y personal.
Por todo este crecimiento continuo,
pero con pequeños momentos de inestabilidad económica y social he decidido
explicar qué es el ciclo económico y cuáles son sus fases.
CICLO ECONÓMICO: es un
conjunto de fases por los que pasa la economía y siempre se repiten en el mismo
orden. Sus fases son las siguientes:
1. Recuperación: es primera
fase del ciclo. Tras una crisis la economía comienza a crecer. Se puede ver aumentado
el consumo general de la economía.
2. Expansión: la economía experimenta un mayor
crecimiento económico y esta “sufre” un calentamiento, por ejemplo un “Boom de
consumismo”, en esta fase suele aumentar el empleo.
3. Auge: en esta fase se
agota el crecimiento de la economía.
4. Recesión: la
actividad económica disminuye y la economía empieza a “enfriarse”. Disminuye el
consumo y la inversión. Aumenta el desempleo.
5. Depresión o crisis: fase
producida por un largo periodo de recesión; se caracteriza por poco movimiento
económico, poco consumo y suele impactar en el ámbito social.
Fuente: Economipedia.
A lo largo de la historia siempre
se ha repetido este ciclo y siempre se repetirá.
Desde el punto de vista
económico, según la etapa en la que esté el ciclo así serán las políticas
económicas que se deberán implantar. La política monetaria es la que se
encarga principalmente de inyectar/absorber liquidez y de modificar los tipos
de interés en base al ciclo económico. Así mismo, la política fiscal de un país
debería ir en la misma dirección del ciclo económico, es decir, aumentar o
disminuir gasto público o recaudación de impuestos según la etapa.
Desde el punto de vista social, según
la etapa en la que esté el ciclo así se podrá ver mermada nuestra calidad de
vida. Debemos tener una buena planificación en nuestros ahorros para que
una etapa de crisis económica no nos haga perder “calidad del nivel de vida”.
Normalmente, las crisis económicas no suelen afectar a todos los sectores ni a
todos los países de igual forma. Por ejemplo, en España quien más se ve
afectado es el sector de la construcción o el del turismo.
Evidentemente, socialmente es un
tema que se debe abordar de forma seria y protegiendo a los ciudadanos más
vulnerables para que no se vea afectado su nivel de vida. Se debe tratar de
forma racional y manteniendo estados del bienestar fuertes y dotados con los
mejores medios posibles para que la pobreza relativa y extrema no aumente.
Por otro lado, desde el punto
emocional, hay que mantener la calma. Debemos saber y tener la certeza de
que la economía mundial (que afecta a las nacionales) no es más que un ciclo
que se repite. Sabemos qué etapas tiene y en cuál estamos. Incluso, sabemos qué
etapa vendrá luego, pero no sabemos cuándo ocurrirá. Las crisis son impredecibles,
por eso mismo se denominan “crisis”. Por eso, mantened la calma cuando los
telediarios comiencen con noticias trágicas en el ámbito financiero y pensad
que las noticias negativas venden más en los medios de comunicación. Pero
pensad también que después la economía estará marcada por una etapa de
crecimiento. De hecho, económicamente hablando este ciclo es imprescindible
para el progreso mundial y para aprovechar oportunidades económicas y
financieras.
Fijaos en el progreso mundial, no
dejamos de crecer, pero cada cierto tiempo vivimos un acontecimiento que nos
hace temblar económicamente, por ejemplo: la crisis del petróleo, el 11 S, las
guerras de Irak, la crisis financiera del 2008, la guerra comercial entre China
y EEUU, el coronavirus o las tensiones entre Ucrania y Rusia. Y vendrán muchas
más…
CONCLUSIÓN.
El objetivo de esta publicación
es trasladar el concepto de ciclo económico y que tengáis en cuenta que siempre
vamos a vivir etapas de crecimiento y de crisis, pero emocionalmente hay que
mantener la calma y pensar que no es algo extraordinario, sino algo ordinario
por lo que pasaremos varias veces a lo largo de nuestra vida. En el corto plazo
podemos ver distintas etapas, pero en el largo plazo, sólo veremos progreso.
Desde el punto social, el
positivismo y el optimismo tienden a ausentarse cuando hay crisis porque desgraciadamente
afecta a colectivos vulnerables que ven altamente mermado su nivel de vida.
Sin embargo, en lo económico, son
oportunidades para personas que poseen una planificación financiera. Las
crisis son un acelerador del progreso.